INTRODUCCIÓN
A la hora de impartir conocimientos hay que tener claros los objetivos que se quieren conseguir, es lo primero a tener en cuenta a la hora de realizar una programación didáctica ya que demostrarán los resultados del aprendizaje del alumnado y condicionarán el resto del proceso.

Los objetivos deben servir de orientación en el proceso de aprendizaje y proporcionar criterios de evaluación y control.
Clasificación de los objetivos
Los objetivos se clasifican en función del grado de especificación de la tarea, así tenemos:
- Generales: de enunciado genérico, sin entrar en materia concreta.
<<Aprender a realizar planos constructivos >>
- Específicos: de enunciado concreto a modo de instrucciones.
<<Clasificación de tipos de líneas empleadas en la creación de planos >>
- Operativos: muestra un criterio observable y por lo tanto evaluable
<<Realiza un plano para fabricación de un eje >>
Los objetivos, a mayores de buscar aprendizaje académico (conocimientos) también buscan fomentar habilidades:
- de carácter cognitivo (destrezas intelectuales o habilidades de carácter intelectual)
- de carácter afectivo (actitudes y hábitos, así como habilidades sociales y personales)
- Psicomotores (destrezas o habilidades motoras, manejo de aparatos)
Otra clasificación de objetivos, desarrollada por Bloom y sus colaboradores, se basa en la hipótesis de que las diferentes operaciones de conocimiento pueden clasificarse en 6 niveles de complejidad creciente, que dependerán de la capacidad del alumnado para desenvolverse adecuadamente en el nivel inmediatamente anterior, jerarquizando los procesos que conducirán a la obtención de los objetivos.
